Pintar es vivir ,cuando pinto vivo mis cuadros. Estoy ahí con ellos todo el tiempo, igual estoy tomando una cerveza con amigos y el cuadro está conmigo en mi cabeza.
Es como una planta germinando , al principio es semilla pero poco a poco va echando una hojita un tallo y va creciendo y la voy regando y abonando y llega un día que florece ( es cuando el cuadro toma la forma que tú más o menos buscabas ) y llega otro día y el fruto cae y es cuando das la obra por terminada.
El siguiente paso es la degustación de ese fruto por los demás. A veces pienso que mi cabeza es un invernadero con muchas semillas germinando y creciendo y necesitando cuidados y abono y agua...Y tengo que controlar la temperatura para que las plantas no mueran por cambios bruscos , tampoco puedo abrir de golpe las ventanas porque los tallos se troncharían con el viento. Todo a su debido tiempo y respetando los ciclos.
Y ahí estoy cuidando los cuadros en mi mente/invernadero. La mayoría de las obras están en flor. Si, ahora en invierno mis obras están en flor.
Invierno, al fin, en estas tierras. Invierno vivo y frío, necesario y hermoso por su precisa delimitación del tiempo sin engaños.
Ya estoy perfilando los últimos detalles de la exposición y me quedan pocas obras por terminar. Pronto, quizá en enero, empiece a buscar sala para exponerla. Ya os seguiré contando en 2017.
No hay comentarios:
Publicar un comentario